El metiche de marras

Tuesday, February 27, 2007

Audiolibro

Ya está en mis manos el disco que incorpora los textos que escribí, medio por iniciativa propia, medio por encargo.
Estoy contento con el resultado, aunque un poco insatisfecho, ya que ahora que lo he escuchado, bien pude haberme extendido más en ciertos párrafos, o en la precisión histórica de ciertos datos.
Pero como he dicho en las entrevistas, a modo de auto desgargo, la intención no es tanto antropológica ni histórica, sino de recuperación de relato y tradición oral, con toda la impresición que eso conlleva.
Ahí está pues el disco, será presentado el próximo viernes y ya escucharé las críticas al respecto.

De vuelta al aro

...O al círculo vicioso.
Ya saben, ese esquema que he mantenido de no tener un trabajo fijo.
Duré en el oxxo lo suficiente para entender los procesos de funcionamiento de los grandes monopolios. Ya les haré llegar mis sesudos ensayos al respecto.
Pero mientras tanto, acabo de criticar el trabajo literario de dos decenas de estudiantes de secundaria en sus concursos académicos artísticos y culturales.
Lo interesante ahí es que después de dos años de criticar la forma que tienen sus asesores de inculcarles el estilo narrativo, por fin han dejado fuera los consabidos: "Había una vez..." y los "...y fueron felices para siempre".
De ahí a que haya una buena historia, falta un poco más.
Aún así, me he encontrado con dos-tres ideas interesantes.
Intentaré publicarlas en el frecuentemente pospuesto resurgir del Perro.

De los afanes de limpieza

Algo acerca de lo que estoy trabajando es un tema paradójico.
¿Han notado con qué obsesión nos ponemos a limpiar nuestro entorno, propiciando con esto la acumulación de suciedad para otros?
Barremos y ponemos nuestra basura fuera de la vista. Limpiamos, blanqueamos, aspiramos, esterilizamos; pero forzosamente, los desechos irán a otra parte a acumularse.
Ahí está el verdadero peligro de estos afanes.
Así, por ejemplo, saber que los líquidos para hacer tan blanco un sanitario, se irán por el desague a hacer extremadamente tóxico un torrente acuífero nos debería dejar una sensación desagradable.

Todo esto, en el ensayo para el que estoy en pleno proceso de investigación.
Ah, el colmo es algo que escuché esta mañana en el noticiero:
Que científicos en Estados Unidos planean sembrar miles de árboles artificiales para que éstos absorban Dióxido de carbono, y una vez capturado, mediante la tecnología usada para perforar pozos petroleros, enterrar en el fondo de los océanos este gas "debidamente" encapsulado.

De entrada, y usando el puro sentido común, ¿No les parece un tremendo absurdo?

se reciben comentarios.

Monday, February 19, 2007

He caído

He caído pues, en las garras de una de esas corporaciones donde se trabaja en la homogenización del individuo.

Bueno, a ver, no estoy como para ponerme trágico ni mucho menos. La cosa es simple: por el momento soy empleado en un oxxo. ( si alguien desea charlar conmigo al respecto, es en el de Acuitlapilco). A los otros mpleados les dije que lo hago sólo para adquirir alguna idea interesante que escribir posteriormente.

Hasta ahora no he logrado más que cansarme mucho, las jornadas son trazadas electrónicamente por el sistema. No hay manera de hacer algo diferente. Cada cierto tiempo hay que hacer lo que la máquina dice. Un sistema inamovible que debe haber sido conformado por un superseso que supo comprender que mientras menos poder de elección se le de al empleado más eficiente será la empresa...

¿En qué quedamos? No voy a criticar, voy a tratar de entender el éxito de esos lugares a costa del trabajo de sus empleados.

¿saben qué es digno de atención? Una empleada me dijo que era feliz logrando que la tienda estuviera en un rango de ventas muy alto. El que no tenga pago de horas extras, que a veces tenga que cubrir otros turnos, que no haya contratos ni prestaciones no le importa. Está contenta. ¿Y no a veces así actuamos en otras circunstancias? Puede parecerme injusto, o una especie de esclavitud disfrazada, o cualquier cosa por el estilo. Pero Otras veces así nos defendemos de los comentarios ajenos "Estoy en esto porque me gusta"; "Estoy jodido porque quiero", y así hasta el desmorone.

Se me ocurre pensar que siempre, en algún lugar, alguien está ganado por lo que nosotros hacemos "por amor al arte".

¿Alguien se atreve a ponerle nombre a los beneficiarios de nuestro trabajo?


Thursday, February 15, 2007

Esa acompañante que me aisla

Es la televisión.
Si hasta hace cosa de un año yo me cuidaba de dejarme embelesar por ella, hoy recurro a su compañía en automático. La televisión me ha estado revelando las diversas facetas del mundo exterior.
Una de ellas, hoy por la mañana, es la consigna católica de los gobernantes mundiales.
Dijeron hoy que según un estudio, los niños de naciones más ricas son menos felices. Y no puedo evitar pensar en aquel axioma: "Bienaventurados los pobres, porque de ellos es el reino de los cielos".
Así es. los mass media dicen que para qué quieres mejor nivel de vida? si así de jodido eres más feliz.

Otro apunte:

¿Han notado como de buenas a primeras dejaron de machacar el tema de las farmaceuticas acaparadoras?
¿Y si, como hacía Paparatzin, aquel reportero de La Serpiente Desplumada, tira periodicazos para que lo callen a chayotazos?
¿Cuánto habrá de por medio?

Una más:
Los frutos de la Ley Televisa ya comenzaron a destilar su jugo. ¿Han visto con qué cinismo ya se anuncian sus concursos de corte casinil?
Hasta hace poco estaban prohibidos los juegos de azar y las apuestas; pero ahora, en la tele podemos chutarnos ruletas, juegos de cartas, maquinitas tragamonedas y todos esos artilugios propios de esquilmadores profesionales.
¿Y quién se atreve a decir que no?

Monday, February 12, 2007

ante el desmoronamiento de las cosas

Quizá no se estén desmoronando, aunque así me siento. Un poco disolviéndome, un poco endureciéndome.
Sé que es difícil precisar este tipo de cosas, claro que lo es. Si fuera más fácil cualquiera podría poner soluciones a sus vidas.
¿Que de qué hablo?
Mi vida de pareja está atravezando por un limbo del cual no sé sacarla. Sucede que a veces cualquier frase aparentemente inocente desata todo. O un olvido, un comentario estúpido, algo.
El caso es que, como buen individuo del sexo masculino, he preferido dejar que las cosas se acomoden solas, que por alguna circunstancia fortuita ella llegue y me salude como siempre, como si nada hubiera pasado, para que a partir de ese momento yo pueda hablar y ponerme a razonar con ella, a decirle que estoy apenado, que no sé que pasó pero que sea lo que sea, intentaré que no vuelva a pasar.
Tengo algunas teorías.
1.- Posiblemente en el sindicato le han dicho que su esposo es un poco raro o dejado. Ya saben, no falta el típico galancete que les endulza el oido: "si yo fuera tu esposo no te dejaría andar sola"... o cosas por el estilo.
2.- Está cansada de sentirse despojada de su dinero, de que no puede comprarse ropa o zapatos cada vez que se le antoja porque todo su dinero lo ponemos en el banco con vistas a independizarnos.
3.- Esperaba que le propusiera algún plan estupendo planeado absolutamente por mi para este 14 de febrero, pero como yo le dije que me sugiriera alguna actividad, se imaginó que ni me interesa la fecha o peor aún, ella.
4.- Está demasiado estresada en el trabajo y cada vez que llega a la casa y ve las mismas cosas se enfurece y se siente atrapada.
5.- O a comenzado a dejar de quererme.

Thursday, February 08, 2007

¡Y ahora?

ya comencé a recopilar los cuentos que van a aparecer en mi más reciente libro. Creo que lo llamaré Ahora que somos tantos.
Hace poco me encontró una novia virtual de hace más de cinco años. Ella es de Colombia y resulta que está viviendo en México, presumiblemente en San Martín Texmelucan, o hasta en Ixtacuixtla.
Y no sé qué hacer.
Mi mujer está enojada conmigo. Como no supe que opción darle con respecto al 14 de febrero...