El metiche de marras

Tuesday, February 17, 2009

el domingo estuve reunido con un montón de gente que hace de la bohemia una forma más de vivir. nada nuevo, pocas sorpresas, una cierta desilusión de ciertos personajes.
Un extranjero acosó a Pepe y por fin hubo quien lo mantuvo callado.
Un fotografo me platicó anécdotas cheleras.
Un pintor y su pareja me contaron los destinos de unos chocolates regalados.
y yo me fui sin recuperar el importe de unas caguamas que compré para la ocasión a pesar de que no bebo cerveza.
y esta semana estaré haciendo antesala consiguiendo lana para mi proyecto editorial.
ya les contaré como me fue.

ya casi somos una sede cultural importante

mientras por un lado un servidor y legiones de sujetos iguales andan por la vida creyendo que hacen arte, los verdaderos detentores del arte y la cultura de Tlaxcala lanzan mega proyectos que hacen palidecer a la mega biblioteca foxiana Vasconcelos. Y es que resulta que ya está anunciada oficialmente la aniquilación de la Escuela Lardizabal y en su lugar erigirán una plaza cultural, con nuevo museo y nueva galería y nuevao pretexto para inflar los presupuestos. Por supuesto que habrá ganancias; para las empresas constructoras y los encargados de distribuir la lana y para el curriculum del partido.
Mientras tanto, si usted se acerca al ITC a solicitar apoyos... Nohay.
si pide informes sobre actividades culturales... no hay.
si pide apoyos a comunidades... no hay.
si gestiona un evento en la casita de cultura del municipio X... no hay.
carajo.
el más reciente museo abierto en Tlaxcala apenas si se llena con la propuesta raquítica. O a poco Miguel N. Lira da para llenar las salas de un museo en exposición permanente?

en fin.

Thursday, February 05, 2009

¿Alguna sugerencia?

Casi nunca sé lo que quiero hacer de mi vida. Cuando Ángel me pregunta siempre me quedo callado. Todo lo que pasa por mi cabeza como posibles respuestas se me revela al mismo tiempo como un pretexto simple. Suelo callarme, aceptar el hecho de que hasta ahora he remendado mis días.
Estoy construyendo una casa, bueno, supervisando su construcción. A veces me siento idiota al llegar y decirle al albañil “oye, quiero que quede de tal o cual modo”. Me siento como si usurpara sus funciones. O sea, se supone que el que sabe es él, no yo. Yo soy incapaz de pegar un ladrillo bien alineado, cómo entonces se me ocurre llegar y sugerir que lo pegue así o asá.
Yo hice la maqueta, pero lo hice bajo una idea sugerida por El Pintor. Yo puse en un plano las medidas pero a medida que han avanzado, éstas no concuerdan con la construcción real. Un par de ocasiones se le han hecho modificaciones porque Ángel prefiere más ventanas, o un muro sin curvatura, o arcos en vez de ángulos. En resumen, estoy parado en medio de algo que no puedo controlar, que no me necesita. Soy una especie de intermediario sin utilidad.
Tengo un espacio en el radio, tengo una cierta famita de roquero, tengo recién adjudicado el título de editor, pero esas cosas las puede hacer otro.
A veces tengo la sensación de que más que ayuda soy un estorbo. Cuando voy a dar talleres a comunidades tengo esa vaga sensación de que alguien llegará y me desenmascarará. Cuando Ángel me pregunta qué me interesa, o cual es mi plan de vida no sé qué responderle.
Ella sabe lo que quiere: Le gusta educar niños, quiere tener una casa propia, quiere viajar, quiere superarse. Hoy en la madrugada la llevé a la terminal de autobuses porque ayer se enteró de un curso de capacitación. Así de decidida es.
Yo me entero de concursos con meses de anticipación y me paso días completos dudando en mandar mis cuentos. Pocas veces he mandado algo. Menos aún he ganado alguno. Carmen González Altamirano me ha dicho en varias ocasiones que le mande algo para el suplemento del Sol. Hasta ahora no he mandado nada, me he censurado todo este tiempo. Luego resulta que leo cosas que estoy seguro que puedo superar. Pero sigo sin mandar nada, pienso en que también alguien pensara que lo que yo escriba él puede hacerlo mejor.Arce me dijo en alguna ocasión que yo le parecía la persona más segura que conocía. Que mis argumentos, mis ideas, mis acciones, hablaban de un tipo que sabe lo que quiere. Hace poco leí un artículo en donde se menciona la pedantería como sello característico de los sujetos con baja autoestima. Yo soy pedante. Lo soy en los momentos menos apropiados. Soy aburrido en las reuniones y me pongo a dictar cátedra de cualquier cosa que presuntamente domino. Soy pedante. Lo soy ahora mismo al pretender que alguien lea esto hasta el final.
Acabo de ver una película donde Nicolas Cage por fin me satisface. Él es un actor que nunca me gusta en papeles de héroe. El sólo hecho de saberlo como protagonista me hace desechar la cinta. Su cara de pujido no me convence nunca. Pero ahora lo descubro en el papel adecuado. La trama que vi me hizo pensar en las primeras líneas de este post. Y así que ahora estoy otra vez pensando en que no sé que hacer de mi vida.
Soy ahora mismo como ese hombre del clima que no sabe pronosticar su futuro y que no comprende porqué la gente le pregunta cómo estará el día.
Hoy no quisiera levantarme de la cama. Me da frío, y tendré hambre y no se me ocurre qué desayunar. Tengo miedo de decir incoherencias a las once, que es la hora del programa. Y luego debo llevar el coche a reparar de esa indecisión motora por avanzar o apagarse, mientras tanto, se la pasa lanzando explosiones por el escape. Más tarde deberé ir a pagarle al albañil.
Ahí está el punto: el radio, el coche y la casa parecen depender de mí. Pero bien podría no estar presente y a lo mejor no pasará ninguna catástrofe.
Otra vez, no sé que hacer de mi vida.
¿Alguna sugerencia, conciencia mía?